¿De dónde venía yo cuando me encontraste?,

preguntó el niño a su madre. Ella, entre risas y lágrimas, apretó al niño contra

su pecho y le respondió: Estabas oculto en mi corazón como un deseo, vida mía.

Estabas entre las muñecas con las que jugaba cuando era niña. has vivido en mi

vida y en la de mi madre. Durante muchos años, has sido acunado en el regazo el

Espíritu eterno que rige nuestra casa. Cuando en mi adolescencia abría mi

corazón sus pétalos, en él flotabas tú como un hálito perfumado. Tu tierna

suavidad floreció en mi cuerpo como el resplandor rojo del cielo que anuncia el

amanecer. Primer amor del cielo, que tienes de hermana gemela a la luz del alba,

has bajado al río de la vida del mundo te has quedado al fin sobre mi corazón.

¡Tú, que eras antes de todos, eres ahora sólo mío! ¿Qué mágico poder ha puesto

en mis débiles brazos el tesoro del mundo?





Rabindranath Tagore



domingo, 16 de enero de 2011

Tu fecha de parto está mal......

Tu fecha de parto está mal
Por Christie Haskell


El modo en que se calcula la “fecha probable de parto” hoy en día es, como poco, impreciso. A menos que sepas el día que ovulaste y el día que concebiste, así como la duración de tu ciclo, y lo calcules tú misma, es probable que tu fecha de parto esté mal: de hecho, puede que ni se acerque. La mayoría de fechas de parto se equivocan de promedio en dos semanas.

Creo que la mayoría de las mamás en Estados Unidos conocen la organización “March of Dimes”, una organización sin ánimo de lucro que se dedica a la prevención de nacimientos prematuros y muerte prenatal, además de estar al frente de las investigaciones sobre el cuidado de bebés prematuros. En estos momentos, están colaborando con 40 hospitales del estado de Carolina del Norte para impedir nacimientos prematuros mediante la prevención de inducciones innecesarias. ¿Su mensaje?

El embarazo puede ser incómodo y a veces francamente infeliz, pero es necesario aguantar hasta el final, y tu médico debe negarse a inducirte el parto salvo que sea necesario por un motivo médico.

Lo sé, lo sé… qué impertinente por su parte decirle a las mujeres lo que deben hacer con sus cuerpos.

Bueno, salvo por el hecho de que su objetivo es asegurarse de que tu bebé está lo más sano posible, y si para eso debes seguir embarazada dos o tres semanas más, entonces os dirán, a tí y a tu doctor, que eso es lo que deberías hacer.

Dada nuestra manera incorrecta de ver la fecha de parto, esto significa que si decides inducir en la “semana 38” sin razones médicas, tu bebé podría ser de 36 semanas de gestación, y por lo tanto ser prematuro y necesitar cuidados intensivos neonatales.

Se parte de la base de que tienes un ciclo de 28 días, ovulas el día 14 y sangras 5 días. No todas somos así. Puede que os parezca demasiada información, pero mi ciclo es de 33 días y ovulo el día 18, de modo que cuando mi médico se empeñaba en que la fecha probable de mi hija era el 5 de julio, yo le recordaba siempre que no soy una humana cortada a patrón: mi fecha probable de parto era el 10 de julio. Mi hija nació de 38 semanas y 3 días, pero ellos decían que fueron 39 semanas justas.

Cada vez que mencionaban la fecha que habían anotado, yo les corregía. ¿Por qué? Por que aunque al final no tuvo importancia, ¿qué hubiera pasado si hubiera llegado a la semana 41 o 42 según sus cálculos, que eran erróneos? Me hubieran presionado para inducirme el parto, a pesar de que el cálculo correcto demuestra que estaban asumiendo que mi hija tenía una semana más que su edad gestacional real.

Pero estoy divagando… “March of Dimes” señala que el cerebro a las 35 semanas de gestación sólo pesa dos tercios de lo que pesa a las 39-40 semanas. Estas 4-5 semanas más marcan una enorme diferencia. Los bebés que nacen incluso dos semanas antes tienen mayores tasas de problemas respiratorios, ictericia, problemas alimenticios, de regulación de temperatura, y retraso en el desarrollo cerebral.

Es mucho riesgo por no estar embarazada dos semanas más, ¿no?

Eso sin mencionar que inducir el parto antes de la semana 39 aumenta substancialmente el riesgo de cesárea, que tiene ya de por sí sus peligros para la madre y el bebé, de modo que no sólo tu bebé puede verse seriamente afectado por una inducción innecesaria y un nacimiento prematuro.

Los esfuerzos de “March of Dimes” y los hospitales mencionados han dado como fruto una drástica reducción en los nacimientos prematuros y cesáreas… nada menos que 44% menos de nacimientos prematuros o pretérmino causados por una inducción electiva e innecesaria. ¡Es una cifra enorme!

Espero que su éxito en Carolina del Norte continúe, sea un ejemplo y establezca unos criterios generales para los hospitales de todo el país para que podamos eliminar las inducciones electivas. Al fin y al cabo, todas las mamás quieren que su bebé esté lo más sano posible desde el primer momento, y después de haber estado embarazada 37-38 semanas, y con décadas de vida por delante para ti y para tu hijo, un par de semanas más no es nada dentro del “gran plan”, pero puede causar diferencias de por vida.